Septenios y Nonenios: etapas de la vida

Somos como la luna. Tenemos varias etapas y cada una tiene características diferentes. Conocer los pasos permite una existencia pacífica. Dentro de este concepto encontramos la Antroposofía, palabra originaria del griego, que significa “conocimiento del ser humano”. La llamada “pedagogía del vivir” fue desarrollada por el filósofo austriaco Rudolf Steiner a principios del siglo 20. Para la Antroposofía, el ser humano necesita conocerse a sí mismo para comprender el Universo, ya que todos nos integramos y participamos del Universo. . En palabras de Steiner, es “un camino de conocimiento que quiere llevar lo espiritual de la entidad humana a lo espiritual del universo”.



En España, la Antroposofía llegó antes de la Segunda Guerra Mundial. Lavinia Viotti tradujo libremente el libro Cómo adquirir el conocimiento de los mundos superiores, de Rudolf Steiner. En 1939, la “pedagogía del vivir” ya se estudiaba en São Paulo, Río de Janeiro y Porto Alegre. Sin embargo, la consolidación tuvo lugar en São Paulo. La capital paulista sigue siendo la cuna de la mayoría de los antropósofos del país.

¿En qué estados también se estudia la Antroposofía?

  • Pernambuco, Ceará, Sergipe, Bahía, Goiás, Mato Grosso, Minas Gerais, España, Paraná y Santa Catarina.

Editorial antroposófica

  • La Editora Antroposófica fue fundada en 1981. Con la iniciativa se publicaron los principales libros y conferencias de Rudolf Steiner. La editorial ya ha publicado 150 libros y es de gran importancia para los estudiosos del tema.

La antroposofía no es una religión, ni una secta. Se practica en grupo en las instituciones donde se cursa la materia. Este pensamiento filosófico no es ni moralista ni dogmático. El individuo vive de acuerdo a sus reglas, sin tener que apoyarse en tradiciones autoritarias que niegan la capacidad y el derecho del ser humano a pensar y actuar de acuerdo a sus pensamientos.



De la “pedagogía del saber” surgió la Teoría de los Septenios. Conozcámosla y aprendamos cómo se relaciona con el cuerpo humano.

Teoría de los septinos

Septenios y Nonenios: etapas de la vida
Humpata / Getty Images / Canva

En la Teoría del Septeno, la vida se divide en fases de siete años. Pero ¿por qué siete años? El número es muy importante. Dios creó el mundo en siete días. Hay siete días a la semana, siete planetas relacionados con el hombre (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno) y siete metales (oro, plata, mercurio, cobre, hierro, estaño y plomo). Los griegos y la medicina tradicional china observaron y estudiaron cambios espirituales y biológicos en los seres humanos. La teoría revela las complejidades de cada etapa y cómo el cuerpo humano influye en las emociones y actitudes. La Teoría del Setenio tiene siete ciclos, los “septenos corporales”.

Primeros Siete Años: 0 a 7 años – intercambio entre lo individual (dormido) y lo hereditario

Aquí se encuentran el lado espiritual de la individualidad y la parte biológica. Las células llevan las acciones de las fuerzas heredadas. Estos permanecen en los riñones de por vida y la fisonomía de la persona muestra esta herencia. Cuando el padre o la madre no conviva con el hijo, el otro deberá compensar la ausencia. Sin embargo, la madre todavía se necesita más. Después de los siete años, el niño gana autonomía.

Segundo Séptimo Año: 7 a 14 años – amada autoridad

Etapa de la dentición permanente y maduración del corazón y los pulmones. El mundo exterior nos encuentra, las fuerzas nos entran y nos dejan. La gran marca es el intercambio. En estos siete años tiene enorme relevancia la autoridad de los padres y maestros, estos adultos orientan el comportamiento del niño. Las actitudes de estos mediadores influyen en cómo el niño verá el mundo. El autoritarismo muestra frialdad y crueldad, la permisividad conduce a conductas inapropiadas.



Tercer Septenio: 14 a 21 años – pubertad y crisis de identidad

La mujer menstrúa y el hombre entra en su fase fértil. El ser humano sale de la abstracción de la infancia y desembarca en el mundo terrenal. En esta crisis de identidad, donde ya no se es niño ni adulto, el individuo quiere libertad. El mundo ya no se limita a la familia y la escuela. La persona quiere ser reconocida como individuo y ser aceptada por un grupo que refleje sus aspiraciones.

La marca de estos siete años son las elecciones, qué profesión seguir y dónde estudiar. En esta etapa es donde comienza la vida profesional, dando parte de la libertad soñada. El joven puede torcer las cosas y creer que el dinero es la clave de todo. Existe la creencia de que somos lo suficientemente maduros, que sabemos todo y podemos hacer juicios racionales.

Cuarto Siete Año: 21 a 28 años – límites de experiencia

Huesos y músculos fuertes. Tanto hombres como mujeres están en el apogeo de la fertilidad. El cuarto período es la fase de las sensaciones y emociones. Es hora de preguntarte si elegiste la profesión correcta, si no lograste mejorar alguna aptitud y si estás en armonía con el mundo, la familia y contigo mismo. El “yo” aún está en fase de formación, sin embargo, se muestra con fuerza. El trabajo es muy importante para esta formación. No alcanzar las metas genera frustración.

Quinto Séptimo Año: 28 a 35 años - fase organizativa

El bazo-páncreas no soporta la carne. El rostro revela las primeras arrugas. El individuo se pregunta si está en el camino correcto. La persona también pregunta si puede expresar sus sentimientos y pensamientos. La famosa “crisis de los 30” trae angustia y vacío. La búsqueda del lugar de uno en el mundo lo lleva a uno en un viaje espiritual. La armonía tarda en suceder, porque hay demandas de estabilidad material. Para la Antroposofía, después del 31 1/2, que es la mitad del año 63 de vida, es el final de las influencias planetarias y zodiacales. Después de esa edad, conquistamos más libertad.



Sexto Séptimo Año: 35 a 42 años – crisis de autenticidad

El funcionamiento del hígado ya no es el mismo. El cabello se vuelve blanco y comienza a caerse. En la fase de conciencia, el individuo se pregunta qué vendrá, si ha adquirido valores importantes y si ha encontrado y lleva a cabo su misión de vida. El sexto período está conectado con el anterior, en términos de crisis. Esto trae descontento y dudas sobre si todavía puedes hacer algo nuevo e interesante.

Séptimo Séptimo Año: 42 a 49 años – altruismo x mantener la fase expansiva

Comienza la menopausia y la andropausia. El pulmón ya no oxigena la sangre como antes. La gran pregunta es si estás desarrollando alguna habilidad. Preguntas sobre la relación marital y con los hijos ocupan la mente. Se ha superado la crisis de los años 30 y se ha iniciado una etapa de nuevos comienzos. En esta fase, el individuo tiene sed de novedades, sin embargo, los cambios provocan miedo. Pero, la persona es plenamente consciente de que “como es, no puede quedarse”.

Octavo Séptimo Año – de 49 a 56 años – escuchando el mundo

Menos vitalidad. Los riñones y el hígado ya no eliminan las toxinas como antes. El período inspiracional o moral trae consigo las siguientes preguntas: “¿Cómo es mi ritmo de vida?”, “¿Qué necesito recortar de mi vida para que surja lo nuevo?”. El octavo período está marcado por la serenidad. La energía vital regresa al centro del cuerpo, enfocada en el bienestar, la moral, la ética, las cuestiones universales y humanísticas. Este período de siete años es fisiológicamente similar al segundo período de siete años (7 a 14 años - intercambio entre lo individual (dormido) y lo hereditario), porque se necesita priorizar el ritmo para comenzar una nueva rutina. Es la fase de una audiencia diferente, en la que escuchamos la voz del corazón para la renovación ética y moral.

Noveno Siete Año: 56 a 63 años – desinterés y sabiduría

Septenios y Nonenios: etapas de la vida
Hasan Albari / Pexels / Canva

Los dientes se caen, la visión y el oído disminuyen, la locomoción y los reflejos se alteran debido a la caída energética de órganos como el corazón, el bazo-páncreas, los riñones y el hígado. El nueve de septiembre es la fase de la intuición. El noveno septenio es equivalente al primero (0 a 7 años – intercambio entre lo individual (dormido) y lo hereditario).

Al cumplir los 56 años se produce un cambio significativo en la forma en que el individuo se relaciona consigo mismo y con el mundo. Hay preocupación por el tratamiento que se le da al cuerpo. Es muy importante estimular el cerebro. Leer, hacer crucigramas, caminar por calles que nunca has caminado. El cerebro, como cualquier otro órgano, necesita ser estimulado para funcionar correctamente.

La comunicación con el exterior se dificulta (choque de generaciones). La persona pasa a valorar la reclusión, porque sabe que de ella depende la búsqueda del autoconocimiento. Este desprendimiento trae una mejora de la espiritualidad.

Decimoséptimo: 63 a 70 años

Es la fase maestra. El niño tiene a su alrededor una luz aún indefinida. En el decimoséptimo año esta luz está en el alma del individuo e irradia. La luz brilla sólo cuando la salud física y mental son buenas.

nonenos

Dentro de la Teoría de Setenio existe otra división cíclica. Los nonenios representan tres seteenios. En los nonios se producen los cambios más significativos del individuo. Estos se consideran más efectivos para el conocimiento y comprensión de las etapas del ser humano. La Pedagogía Biográfica Clínica estudia la influencia de la interacción entre sevenenians y noneniums en la vida de las personas. Esta pedagogía comprende la Consejería Biográfica y la Antroposofía. El objetivo es encontrar y comprender la realidad y los desafíos del individuo.

La explicación de la Pedagogía Clínica Biográfica es la siguiente:

  • El estudio y la transmisión de conocimientos sobre las etapas del individuo tiene carácter educativo - Pedagogía
  • La persona que te permite recibir este conocimiento – Clínica
  • El estudio y conocimiento del yo se basa en ritmos biográficos – Biográfico

Conoce los diez nonios y sus características:

0 a 9 años: Periodo de crecimiento

Septenios y Nonenios: etapas de la vida
Maica / Getty Images Firma / Canva

Estructura del cuerpo físico. Fase de adaptación de la estructura física – entendiendo que ese es el mecanismo para alcanzar tu destino.

18 a 27 años: Periodo de lucha

El trabajo, la vida afectiva y los amigos llevan al individuo a explorar el mundo externo e interno.

27 a 36 años: Búsqueda de estabilidad

Los aspectos físicos, psicológicos y espirituales tienen una fuerte conexión con la elección de la profesión, la vida afectiva y social. En este período de nueve años, la persona planifica su vida y trabaja mucho más que en las otras fases.

36 a 45 años: Periodo de rupturas

Fase donde todo es para ayer. Las máscaras necesitan dar paso a la búsqueda del autoconocimiento.

45 a 54 años: Metamorfosis

Las rupturas del período anterior dan lugar a la reestructuración del recorrido personal. La ternura es un sentimiento que gana mucha fuerza.

54 a 63 años: Aprendiendo sabiduría

En este período de nueve años, la persona aprende a celebrar cada momento, a celebrar las diversas superaciones y la evolución personal.

63 a 72 años: Ejercicio de la libertad

Vivir sin las exigencias de la vida cotidiana y de las personas. Es hora de hacer algo nuevo y con libertad.

72 a 81 años: Experiencia diaria con fantasmas

Septenios y Nonenios: etapas de la vida
Ruslan Guzov / Getty Images / Canva

Entender que las explicaciones reducen la realidad. El sentimiento de percepción es más grande que cualquier cosa. El ser humano tiene asombro y asombro de por vida.

81 a 90 años: Experiencia de la inocencia

En esta etapa, el individuo está vacunado contra los trucos y males de la vida. Sin embargo, logra mantenerse por encima de todo eso y cultivar el amor.

Los septenios y nonenios son nacimientos. Los primeros están relacionados con el funcionamiento del cuerpo humano y cuestiones psicológicas. El segundo ciclo trata más sobre el posicionamiento del “yo” en relación consigo mismo y sus experiencias sociales. Ambos tienen en común las complejidades del ser humano hasta la vejez, periodo habitualmente olvidado.

Al conocer y comprender todas las fases por las que atravesamos, tenemos la tranquilidad de aceptar nuestros puntos negativos y trabajar para mejorar. Sin embargo, es necesario que el individuo quiera aprender más sobre su existencia y sobre su cuerpo. Pero las palabras de Rudolf Steiner:

  • Chakras: qué son y cómo funcionan
  • La búsqueda de la luz interior en tiempos de crisis
  • Más información sobre la quinta dimensión y la otredad
  • Conoce los conceptos y beneficios de la alimentación antroposófica
  • Descubre la biografía humana y comprende mejor cada fase que vives
  • Comprender la relación de la psicología del desarrollo y las etapas de la vida humana.

La antroposofía sólo puede ser reconocida por quien encuentra en ella lo que, desde su sensibilidad, debe buscar. Por lo tanto, sólo pueden ser antropósofos las personas que sientan ciertos interrogantes sobre la esencia del ser humano y del universo como una necesidad de la vida, así como el hambre y la sed.

Incluso si no tiene ganas de expandir su horizonte de conocimiento, siempre pasamos por períodos en los que cuestionamos nuestras elecciones y cómo estamos viviendo. En algún momento de la vida buscamos respuestas, sin embargo, estas muchas veces se buscan en los lugares equivocados y con las personas equivocadas. Pero cuando la búsqueda de la esencia habla más fuerte, la persona sabe dónde y con quién buscar ayuda.

Los septenios y nonios no son religiones, por lo tanto, no hacen milagros. Los que realmente estén interesados ​​en el tema necesitan estudiar con voluntad, seriedad y paciencia, porque nadie sale de la ignorancia de la noche a la mañana.

Basado en estudios aplicados por el Instituto Veredas Prolíbera y la Biblioteca Virtual de Antroposofía.

Añade un comentario de Septenios y Nonenios: etapas de la vida
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.

End of content

No more pages to load