La rueda de las estaciones está girando, el invierno está terminando y tendremos la oportunidad de experimentar la primavera. En esta época del año, la naturaleza se vuelve aún más hermosa, luciendo bellas flores de los más variados colores, intensos y diferentes perfumes. Contagiando alegría y color, felices para los que están despiertos para aceptar, sentir y vivir esta nueva etapa, la primavera.
Las estaciones cambian, la vida cambia. Hay que apreciar el momento, vivir el aquí y ahora, aprender a disfrutar de lo que está pasando. En invierno, cuando hace más frío, no tiene sentido quejarse diciendo "podría" hacer más calor. No, no podría. Está frío. Aprende a gustar del frío que está pasando, no te quedes estancado en el mismo clima, en la misma estación.
Acepta los cambios, al igual que las estaciones, las cosas cambian, la vida fluye, suelta lo que no puedes contener y acepta la nueva etapa, disfrútala.
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Deja de esforzarte para aferrarte a la rueca. Mira una flor abrirse por la mañana, qué gracia. No hay esfuerzo, la flor simplemente se mueve según la naturaleza. La flor se abre a la vida, aunque cambie el tiempo, a veces hace calor, a veces hace frío, a veces cae la lluvia, y ahí está la flor, creciendo con los cambios, sin quejarse de que "debería" hacer calor en ese momento.
Mira tu vida, cuántas cosas pasaron hace años y todavía estás tratando de aferrarte a ellas. Todavía se queja de que "deberían" haber sido diferentes de lo que eran. Quejarse de que usted u otros “podrían” haber actuado de manera diferente a como lo hicieron ellos. Date cuenta de que actuando de esta manera, te estancas, te atascas en el pasado, interrumpiendo tu flujo hacia lo nuevo.
Al igual que la naturaleza que se transforma con cada nueva estación, transfórmate tú también, acepta los cambios, fluye más fácilmente, sé parte del hermoso jardín primaveral, la Kinesiología Cuántica puede ayudarte a florecer.
