O Ego es una parte de la personalidad humana que crea una especie de máscara social, para que cada individuo pueda adaptarse al medio ambiente en que se inserta. Las otras partes componen los rasgos de personalidad. El Ego tiene una función armonizadora, nos guía a elegir sabiamente, asumiendo el papel de mediador entre los deseos del Ello y la realidad del Superyó. Esta parte en cuestión se mantiene entre las otras dos, alternando necesidades primitivas con impulsos morales y éticos.
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Mientras tanto, empatía es el estado normal de percepción. Todos los niveles dentro de esta categoría median y representan aspectos del ser consciente, por lo que el ser humano es capaz de detectar y reparar cada acción. La conciencia es el sentimiento y conocimiento que le permite al ser humano experimentar, vivenciar y comprender aspectos del mundo, es la cualidad de la mente que engloba la subjetividad, la autoconciencia, la sintiencia y la sapiencia. Diferenciar el Ego de la Conciencia es sencillo, basta entender que el Ego es en realidad un nivel que conforma los aspectos y características de la Consciencia, como una forma de actuar sobre nuestros impulsos y acciones. De esta manera, el Ego está dentro de la Conciencia.
Además de los significados dentro de la psicología, Ego también es una expresión para referirse a los defectos y el lado malo de una persona, una falsa identidad de grandeza que define a un individuo. Esto se considera una versión más popular de la palabra ego o una forma de definir un ser egocéntrico. En el mismo contexto, popularmente se dice conciencia como una forma de mostrar la claridad y lucidez de un individuo, la expresión “fulano es consciente de sus actos” es un buen ejemplo para definir esta alusión a la palabra conciencia.
