La ansiedad es un sentimiento normal, común a toda persona ante algún problema o acontecimiento anhelado. Por ejemplo, es bastante normal sentir ansiedad antes de un examen de ingreso a la universidad o el día de tu boda, o incluso ante algún hecho que pueda generar aprensión.
Sin embargo, cuando la ansiedad se vuelve excesiva, sin una razón aparentemente lógica y limitando la vida de la persona, se convierte en un trastorno y necesita cuidados. La persona que sufre trastorno de ansiedad acaba presentando síntomas físicos y psicológicos, capaces de causar daño a tu vida, ya que en ocasiones pueden ser incontrolables.
sintomas de ansiedad
La ansiedad como trastorno suele ser bastante incómoda, pudiendo llegar al punto de ser incapacitante para la persona que la padece. Puede tener una variedad de síntomas, tanto psicológico (tensión nerviosa, sensación de que va a pasar lo peor, irritabilidad, miedo exacerbado y constante, problemas de concentración) como Físicos (boca seca, opresión en el pecho, sudor frío en manos y pies, mareos, temblores en las manos u otras partes del cuerpo, dolor de estómago, dificultad para respirar, tensión muscular).
Algunos de los síntomas físicos pueden parecerse a los de otras enfermedades, como un ataque al corazón u otros problemas cardiovasculares. Por eso es muy importante acudir al médico para un diagnóstico correcto.
Diagnóstico y tratamiento
El primer paso es buscar tratamiento médico, para prevenir otras enfermedades, y posteriormente la ayuda de un psicólogo o psiquiatra.
El tratamiento médico para la ansiedad es medicamento – si es necesario – y el psicoterapia. Pero también vale la pena analizar tu estilo de vida, intentar practicar ejercicios, adoptar una dieta saludable, meditar, buscar alguna distracción o pasatiempo (hacer higiene mental), intentar dormir bien, para tener un sueño verdaderamente reparador.
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Es cierto aceptar que la ansiedad es parte de nuestra realidad conductual es muy importante, incluso saber afrontar el problema correctamente, sin falsas expectativas.
Podemos encontrar en la naturaleza grandes aliados en el tratamiento de la ansiedad, que debe ser holístico. Hay Alimentos que funcionan como verdaderos remedios para tratar los síntomas de ansiedad:
Manzanilla
Es un gran remedio natural para la ansiedad. La manzanilla es una de las plantas medicinales más antiguas y conocidas. Su uso más habitual es en forma de té elaborado a partir de las hojas secas, ricas en sustancias bioactivas como los flavonoides. Ayuda a reducir la tensión muscular y mejora la calidad del sueño.
También existe la posibilidad de utilizar sus hojas y flores para hacer una almohada aromática, que ayudará mucho a calmar y facilitar el sueño.
Valeriana
Otro excelente remedio natural para la ansiedad. De nombre científico Valeriana officinalis, es una planta formada por flores blancas y rosadas. Tiene en su composición L-teanina, un aminoácido que tiene un efecto calmante y relajante.
Un estudio realizado por Food Science and Technology en 1999 reforzó la eficacia de la acción relajante de la L-teanina en el organismo, sin provocar somnolencia. Entre los principales beneficios de este aminoácido destacan: inducción a la relajación; promover el sueño equilibrado; reducción del nerviosismo, la ansiedad y el estrés; aumento de la memoria cognitiva, la concentración y el estado de ánimo; y promover el bienestar. Además, es un gran agente para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual.
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Hierba de San Juan
Es una hierba que posee activos como la hipericina, sustancia con principios antidepresivos. En Alemania, el extracto de Hypericum perforatum (nombre científico de la hierba de San Juan) se usa ampliamente para el tratamiento de la depresión leve. Pero la hierba de San Juan tiene contraindicaciones y efectos secundarios, por otro de sus fitoquímicos, la hiperforina (que, entre otros efectos, puede reducir la acción de los retrovirales y las píldoras anticonceptivas). Sin embargo, ya existe el extracto de hipérico sin hiperforina. Pero aún así, es necesario consultar a un médico y recibir la receta para el uso de este medicamento.
Plátano o Cambur
Entre los múltiples beneficios que aporta a nuestro organismo, el plátano también es rico en triptófano, un aminoácido precursor de la serotonina. La serotonina es un neurotransmisor que promueve sentimientos de bienestar. Los alimentos ricos en triptófano son los encargados de mantener el nivel de este neurotransmisor en el organismo.
La hierba de limón
También conocida como melisa, esta hierba es muy utilizada como remedio natural para la ansiedad. Actúa disminuyendo las palpitaciones del corazón provocadas por la tensión. Se utiliza en forma de té. Puedes probar y usarlo junto con el té de manzanilla. El sabor es genial, y los efectos aún mejores.
Passiflora
Es muy utilizado para solucionar problemas de insomnio. Pero también tiene propiedades antioxidantes, antibacterianas y vasodilatadoras. En muchos países, es el ingrediente activo de un medicamento que trata la ansiedad y el nerviosismo. Se puede consumir en forma de tés, tinturas y cápsulas.
La pasiflora es la flor del maracuyá, que también es una fruta con propiedades calmantes, y se puede consumir en forma de jugo.
Lechuga
Ahora es de conocimiento común que la lechuga tiene el poder de calmar. Esto sucede gracias a la lactucina, una sustancia que tiene un poder sedante y se encuentra en la hoja y especialmente en el tallo de la lechuga.
Lo más habitual es consumir esta verdura in natura, en una ensalada, pero también puedes consumirla en infusiones o zumos, como el de la receta de un delicioso batido calmante que te dejamos a continuación.
Batido antiestrés
Ingredientes:
Pulpa de 1 maracuyá
1 plátano (congelado)
1 hoja de lechuga
1 vaso de agua (200 ml)
Preparación:
Batir la pulpa de maracuyá con un poco de agua y colar. Vuelve a batir con los demás ingredientes.
Pero ¡cuidado!
Las hierbas funcionan como un excelente remedio natural para la ansiedad, pero “natural” no significa que esté libre de riesgos. nunca automedicarse ni siquiera tome nada sin el conocimiento de su médico, y lo más importante, la ansiedad debe diagnosticarse antes de que pueda tratarse. ¡Y la mejor persona para recetar cualquier medicamento es el médico!
