Nuestra mente está llena de secretos y misterios, y en Eu Sem Fronteiras hemos separado algunos trucos que puedes desarrollar para ser cada vez más dueño de tu mente:
1 - Cuando interactúas con un grupo de personas que conoces o no, identificas naturalmente a las personas que pueden tener una mayor afinidad contigo. En una situación divertida, por ejemplo, sonríes buscando a alguien que te haga sentir más cómodo y receptivo;
2 - Para sentirte más seguro, imagina que a todos en la misma habitación les gustas mucho;
3 - Cuando te sientas estresado o nervioso haciendo algo que te provoque malestar e incomodidad, masca chicle o come algún alimento. Está comprobado que nuestro cerebro no identifica el peligro mientras comemos;
4 - Si es posible, nunca escribas o digas “Creo que” o “Creo que”, ya que implica que no dominas un tema determinado. Refuerza la confianza en ti mismo y tu cerebro hará lo mismo al dejar de lado las suposiciones y estar seguro de lo que dices;
5 - Para sentirte feliz, fuerza una gran sonrisa, ya que las expresiones forzadas te moldean y fijan para sentir verdaderamente la emoción;
6 - La gente recuerda cómo los haces sentir, pero no recuerdan lo que les dijiste. Un consejo para una primera cita, por ejemplo, es llevar a la persona a algún lugar donde te asocie con buenos y felices sentimientos;
7 - Cuando conoces a una persona y demuestras que estás feliz de verla, siempre te asociará con ese sentimiento. Los perros también usan este método todo el tiempo;
8 - Antes de cualquier entrevista de trabajo, trata de escuchar música animada y de preferencia con letras que hagan referencia a batallas y victorias. El rock y la música electrónica son buenos consejos. Llegarás a la entrevista sintiéndote más seguro;
9 - Transmita confianza y autenticidad a las personas que conoce por primera vez mirándoles a los ojos y notando también su color. Mirar a los ojos transmite buenas energías;
10 - Cuando actúas confiado y seguro de ti mismo de forma natural, las personas tienden a admirar este tipo de personalidad y se convierten en buenos amigos.
Texto escrito por Bruno da Silva Melo del Equipo Eu Sem Fronteiras.