Despertar espiritual: ¿alguna vez has vivido uno?

Tener un despertar espiritual es el momento en que nos damos cuenta de que hay mucho más en la vida de lo que nos enseñaron y nos obligaron a creer. Él da pequeñas señales sutiles cuando sucede. Es una especie de crecimiento de la conciencia y del espíritu que nos hace mejores individuos. El despertar espiritual se basa en la idea de que hay mucho más para nosotros, Dios, el universo y la experiencia humana.

Entonces sucede en el momento en que algo dentro de nosotros siente que hay un significado mucho más profundo esperando ser descubierto, y cuando eso sucede, nuestro cuerpo, mente y alma se transforman.



Aquí hay tres señales de que estás experimentando un despertar espiritual:

Cuando comienzas a experimentar un despertar espiritual, en consecuencia te vuelves más ligero. De esta manera, el miedo se reduce. Lo que los demás piensen de ti ya no te preocupa tanto como antes. La popularidad, la reputación social, la fama y la aprobación ya no son factores estresantes y preocupantes, porque te das cuenta de que el sentido de identidad es mucho más profundo que eso.

Esto sucede porque llegas a relacionarte con el universo como un todo y confías en él. Y una vez que se establece la confianza, ya no hay lugar para el miedo. Incluso la preocupación por la muerte disminuye. Todo en tu vida sucederá de la manera que lo necesites.

Despertar espiritual: ¿alguna vez has vivido uno?A partir del despertar espiritual, te vuelves más profundamente interesado en buscar conocimiento, experiencia y sabiduría. Solo pensar en qué hacer los fines de semana y cuando llegas a casa del trabajo ya no es importante. Las cosas que solías hacer para pasar el tiempo libre ahora te parecen redundantes e inútiles.



Así, todos tus hábitos, estilo de vida y costumbres comienzan a cambiar. Tus relaciones, tu alimentación, aficiones, tiempo libre, entre otras cosas, sufren una transformación espectacular. Es común en este período distanciarnos de personas que ya no son capaces de encontrar nada en común, algo que antes nos unía.

Empiezas a hacer nuevas actividades. Tal vez quieras leer, pasar tiempo en la naturaleza, hacer senderismo, sentarte bajo las estrellas, practicar yoga, meditar, invertir en una aventura o alguna actividad energética.

Esta es la mayor señal de que algo dentro de ti se está gestando.

La tercera señal de que estás experimentando un despertar espiritual es la sincronicidad que se vuelve parte de tu vida. Empiezas a observar varias coincidencias, y la probabilidad de que esto suceda es tan, tan pequeña, que no existe la menor posibilidad de que se pueda atribuir a la simple casualidad.


En resumen, cuando tus emociones, pensamientos y energía se alinean con el universo, comienza a actuar a tu favor. Sin embargo, cuando dejas de trabajar con él, sus efectos positivos dejan de funcionar.


Escrito por Flávia Faria del Equipo Eu Sem Fronteiras

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