Estudiando Constelación Sistémica, al escuchar una conferencia de Luciano Alves, me ayudó a analizar con mucha lucidez que, si la madre es quien da la vida, generando al bebé en su propio cuerpo y la primera fuente es la leche materna, esa desconexión estaba relacionada conmigo que Soy su madre, entonces me di cuenta de que me estaba quejando de algo sistémico que venía de mí. Oh, oh, oh, “hagámoslo” diferente entonces…
Estudiando más, en el libro “Órdenes de ayuda” de Bert Hellinger, hay un trauma de “amor interrumpido” cuando el niño se siente privado del amor de su madre que por alguna razón estuvo ausente, bingo, tuvo un embarazo muy solitario. y cuando di a luz di a luz a mi nena, me enferme mucho y mi bebe estuvo 15 dias sin mama (estuve en el hospital, luchando por mi vida), y aun cuando volvi a casa me tomo un tiempo estar ahí, disponible para mi querida hija.
La verdad salió y el aprendizaje es que las mujeres de mi sistema, mi abuela, mi madre y yo, no pudimos estar disponibles para sus hijas hijas.
Wow… Entonces, de este aprendizaje declaro:
Mi querida hija, aprecio todo el crecimiento y el aprendizaje que vino a través del dolor que sentimos, pero que por elección y conocimiento ya no necesitamos sentir.
Elijo estar amorosamente presente para ti y daré una calurosa bienvenida a las chicas que traigas a nuestro sistema, porque el amor convierte el dolor en luz y ¡te amo absurdamente!
Así también declaro, por el poder que me ha sido dado para ser tu madre: Que te conectes con toda la ABUNDANCIA y ABUNDANCIA DIVINA.
Que así sea.