Algunos puntos de la historia normalmente no se comentan, salvo en los grupos de estudio de algunas religiones, ya que ciertos temas suelen quedar olvidados por otros acontecimientos o también pueden chocar con las ideas de ciertas creencias.
El retorno del espÃritu a la vida corporal es una evidencia, pero muchas creencias no lo admiten. Uno de los pasajes, como decimos cuando nos referimos al Evangelio, es el de los momentos que precedieron al nacimiento de Jesús. Solemos comentar extensamente con motivo de la Navidad el nacimiento del Maestro, llegando incluso a tener música mencionando que nació en un pesebre, dando asÃ, desde el nacimiento, una demostración de sencillez.
Pero en aquellos tiempos habÃa una determinación gubernamental de sacrificar a los niños que nacerÃan, porque temÃan el surgimiento del LÃder que se esperaba, según profecÃas y comentarios generales.
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¡Mira qué difÃcil es para el espÃritu volver a la carne, porque aún en la espiritualidad, sabiendo las metas que tienes que alcanzar, no estás seguro de que lo lograrás! Uno de los ejemplos es Jesús, que su madre y su padre tuvieron que salir en fuga de una localidad para que se produjera su nacimiento y estuviese fuera del peligro de persecución.
Mesmo Jesus, que reunia capacidades especiais e tinha uma missão Divina, pois trazia a segunda revelação que é o Evangelho, teve de passar por providências no sentido de ter seu nascimento concretizado e, portanto, sua vida preservada para cumprir assim os objetivos que o trouxeram la tierra.
Nos dias de hoje somos perseguidos também por situações que escapam a nossa capacidade de defesa, pois vivemos um momento de violência, o que nos causa aflições, pois não sabemos se saindo de casa retornaremos, dado o clima de insegurança que se instalou de um tempo para aquÃ. Ni siquiera sabemos qué pasará a pesar de que estamos en nuestro último reducto, que es el hogar.
Asà vivieron MarÃa y José los momentos que precedieron al nacimiento del Niño y también después del nacimiento, ya que Él fue perseguido constantemente por tener ideas contrarias al plan polÃtico de la época.
No debemos desanimarnos ante las dificultades. El miedo es parte de nuestros sentimientos y debemos enfrentarlo como lo hicieron quienes se acercaron al Maestro en aquellos dÃas.
Todos tenemos metas que cumplir aquà en la Tierra, por pequeñas que sean. Eso depende de la capacidad de cada persona. Dios no da una carga mayor de la que podemos llevar, y quejarnos de las dificultades solo empeora nuestra situación frente a lo que nos proponemos en la espiritualidad antes del nacimiento.
Ya somos ganadores por haber logrado venir al mundo. No nos desanimemos ante la dificultad.
Peleemos. Mucha paz, amigos.
