El amor, un sentimiento, acciones tan bellas y puras de un ser humano a otro. La esencia de acogida, seguridad y crecimiento tan fundamental en la convivencia y evolución humana.
Con esto, muchas personas asocian el amor cuando se quiere mucho al otro, por estar en una relación amorosa por mucho tiempo, por el intercambio de cariño, besos, abrazos, declaraciones, paseos y experiencias amorosas y recíprocas.
Todavía hay quienes dicen amar cuando hacen el amor, el sexo, sentirse tan bien en el intercambio de energías y calor humano.
Sin embargo, a pesar de que estas palabras están tan de moda socialmente y en el intercambio de relaciones entre las personas, lamentablemente pocos han experimentado la verdadero efecto del amor.
Porque, la mayor característica del amor por otra persona, además de querer, hacerla feliz, ser feliz y compartir momentos de grandes emociones, es fundamental tener compañía, atención y cariño, apoyo sobre todo en los momentos más difíciles que el otro puede estar pasando, con indecisión, fracasos y tristeza en general.
Sin embargo, en muchos casos, aunque sean grandes amigos, novios o casados, la persona agraviada es castigada, se pelean con ella y la critican severamente por sus faltas.
Pero espera...
¿No estamos hablando de amor, de querer el bien y acoger al otro, de ayudarlo en sus momentos en que tanto lo necesita, más aún cuando es frágil? Entonces, si no hay ese sentimiento iluminado y atención, escucha y ayuda a través de la bondad y la consideración en poder contar con ella, no es amor.
Amar es acoger la tristeza, el desengaño de los demás, es tener la madurez para transformarlos en experiencias de aprendizaje, crecimiento y unión.
¡Todo depende de como lo veas!
¡Solo viviremos en un mundo mejor, a partir del cambio de ti mismo!
Aquí está el consejo:
Piense en la forma en que está viviendo con las personas muy especiales en su vida.
Si estás siendo un poco intolerante o punitivo, cámbialo, errar es de humanos.
Sin embargo, lo que no podemos aceptar es el dictado de normas, la insensibilidad y castigo al otro, el envenenamiento del propio amor y acciones de soledad y sufrimiento al prójimo.
“Los milagros suceden cuando nos permitimos revivir una nueva oportunidad de ser felices”
– El Teatro Mágico.
Referencias bibliográficas
CURY, A. Padres brillantes, maestros fascinantes. Sextante. Río de Janeiro, 2008.
Diniz, L. Arteterapia y las Diosas: Viviendo el Olimpo. Wak Río de Janeiro, 2015.
PEREZ, A. Psicología Positiva: teoría y práctica: descubrir y aplicar la ciencia de la felicidad y las cualidades humanas en la vida, el trabajo y las organizaciones. Editorial líder. São Paulo, 2016.
