vino o champán

    vino o champán
    ¿Y si nos comportáramos como un vino, con cuerpo, intenso y con un sabor fuerte? ¿Qué pasaría si fuéramos menos inútiles y volátiles y pusiéramos un poco de nuestro corazón en todo lo que hacemos? ¿Qué pasaría si todos los días pudiéramos tener 40 minutos para nosotros solos? Y si pudiéramos tener oídos y ojos atentos a todo lo que hacemos, ¿qué pasaría si pudiéramos dejar de hacer todo en automático y ver al otro, además de nosotros, todos los días? ¿No sería mejor que esperar a fin de año para ser feliz?

    ¿Y si imagináramos nuestra vida como un péndulo, y estar vivos significara mantenernos entre la alegría y la tristeza? Cuando había un pico en un lado, en consecuencia tendríamos un pico en el otro. ¿No sería más correcto mantener este péndulo lo más equilibrado posible? ¿No demasiado aquí, no demasiado allá?



    Y tú, ¿qué prefieres, vino o champán?

    También te pueden interesar otros artículos del autor: La carrera

    Añade un comentario de vino o champán
    ¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.

    End of content

    No more pages to load